Capítulo 23 – Proliferación de peñas en los años 50

Los años 50 significaron un nuevo impulso de unas peñas que se habían visto afectadas por la Guerra Civil, de la cual solo una sobrevivió. A finales de la década de los 50, llena de altibajos, ya se superaron las 30 peñas. Ellas fueron testigos de la ilusión inicial con el Barça de las Cinco Copas, la desilusión con el frustrado fichaje de Di Stéfano, y de nuevo la ilusión que significaba la inauguración del Camp Nou y la llegada posterior de Helenio Herrera como entrenador.

En paralelo, el Real Madrid iba conquistando un nuevo trofeo organizado por un prestigioso diario francés que más tarde se convertiría en la Copa de Europa, pero el Barça crecía con nuevos fichajes hasta conseguir la temporada 1958/59 una plantilla que ha sido considerada por muchos historiadores como la que más estrellas ha tenido en toda la historia del Club. A los jugadores que todavía quedaban de la época de las Cinco Copas, se les unieron otros que habían servido de relevo por el camino y unos recién llegados considerados estrellas mundiales de diferentes países. El fútbol estaba en plena ebullición, los estadios estaban llenos y el Barça, igual que sus peñas, había sabido renacer como el ave fénix des sus propias cenizas, producidas por el conflicto bélico español de finales de los años 30 y la dura posguerra con el ruido de fondo de la Segunda Guerra Mundial. En las temporadas 1958/59 y 1959/60, conseguiría dos Ligas seguidas.

La Penya Sevillana de Barcelona

En capítulos anteriores, se mencionó a la peña Gol de Dalt, única superviviente de la guerra, así como la Penya Solera y la Penya de Sants. También existe información de una peña formada por gente sevillana, no se sabe si en Sevilla o en Cataluña, que se creó de forma no oficial durante aquellos años 50 y se denominó Peña Sevillana del Barcelona. Sea como fuere, y según informaciones de la Federación de Peñas Barcelonistas de Andalucía, nunca fue una peña oficial y solo hay de testigo de su existencia una fotografía donde un grupo de aficionados muestran una pancarta con este nombre.

Inicio de la expansión de las peñas

Además de esto, durante aquellos memorables años 50 se crearon varias peñas que aguantaron el paso del tiempo como peñas oficiales. De las más de 30 que existían, han llegado a nuestros días menos de la mitad, según todas las investigaciones llevadas a cabo. Empezando por la Penya Solera de Castellar del Vallès, la peña oficial más antigua que existe actualmente, serán protagonistas de próximos capítulos y desembocarán en la primera peña creada fuera de Cataluña: la Peña Barcelonista Santa Cruz de la Palma, en la provincia de Santa Cruz de Tenerife. Este será el punto de partida de las diferentes peñas que aparecieron ya en los difíciles años 60. Entonces, había problemas con las autoridades franquistas, que nunca vieron con buenos ojos la creación de unas asociaciones sospechosas de esconder intenciones prohibidas por la Dictadura tras la pasión por un equipo de fútbol.

A partir de aquí, hubo una expansión del mundo peñístico hasta acabar el siglo XX. Desde la creación de una peña en Andorra a inicios de los años 60, tendrían que pasar casi veinte años para ser testigos del nacimiento de la primera peña fuera del Estado Español y de Andorra. Este hecho pionero se llevaría a cabo en un lugar muy especial en aquel momento: la ciudad de Leningrado, en plena Unión Soviética. Esta historia se explicará en capítulos posteriores.